¡Al fin continúa el Blog Tour de Opposition!!! Me estaba matando la espera jajaja. (Leer el fragmento anterior para entender de que viene, aquí está el link)
"¿Físicamente?"
Con mi mandíbula apretándose ferozmente, obligué a mi barbilla hacia arriba y hacia abajo. "¿Quieres más que eso?"
Elegí mis palabras cuidadosamente. "Lo que quiero es un hogar donde mi familia esté a salvo, y sólo nosotros podemos proporcionar eso. Estamos primero."
La cabeza de Rolland se inclinó hacia un lado, sin apartar la mirada de mi cara. "Lo estamos. Y pronto tendrás ese hogar seguro para tu familia. Ya está en marcha."
Quería preguntarle exactamente cómo estaba en marcha, ya que todo lo que había visto de ellos hasta ahora era un montón de asesinatos desagradables. Silencio lleno de tensión se extendía entre nosotros, y entonces él movió su mano a la puerta. "Ve a hacer lo que tengas que hacer, pero por favor no arrojes a Sadi contra nada. Ella tiene sus usos que podría querer utilizar más adelante."
A caballo regalado no le mires los dientes, así que me di la vuelta y me dirigí hacia la puerta.
"Oh. ¿Y Daemon?"
Mierda. Me detuve, volviéndome hacia él.
La maldita sonrisa estaba en su cara, la misma sonrisa que había llevado cuando se dirigió al público al principio del día sobre las noticias locales. Cuando le había dicho a la ciudad, o lo que quedaba de ella, que todo iba a estar bien, que la humanidad prevalecerá y toda una carga de más basura que en realidad hizo sonar creíble.
"No hagas que me arrepienta de no haber apagado tu vida en la limpieza, porque si eres un trataaie," dijo, cayendo en nuestra lengua nativa, "no seré yo a quien temerás, sino a los seni-traaie. No sólo perderás a tu familia, sino que esa niña ahí arriba va a sufrir una muerte muy lenta y muy dolorosa, y su horror será la última cosa que veas. ¿Inteliaaie?"
Volviéndome rígido, asentí de nuevo. "No soy un traidor y sólo respondo a nuestro líder. Entiendo."
"Bien," dijo, levantando la mano. Un control remoto voló de la mesa a ésta. "Recuerda. No arrojar a Sadi."
Despedido con el tipo de advertencia de mordida-en-el-culo, salí de la oficina y casi atropellando a mi hermana mientras salía al patio.
Ella agarró mi brazo, sus dedos clavándose en mi piel. "¿Qué diablos estabas pensando?"
"¿No se supone que le estarías consiguiendo un bocadillo tarde en la noche?"
Sus ojos brillaron. "Podrías haber conseguido que te maten allí protegiéndola."
La miré fijamente por un momento, en busca de algo, cualquier cosa en ella, y no encontré nada. Quité su mano gentilmente. "No tengo tiempo para ésto."
"Daemon".
Ignorándola, me fui a través de un área de descanso y luego tomé dos escalones a la vez. Cuando llegué al segundo rellano, ya podía oír los gritos procedentes de la tercera planta.
¡Quiero saber más!!! Cada día estoy más ansiosa por el lanzamiento de este libro.
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