HIJOS DE SANGRE Y HUESO - Tomi Adeyemi
(Legacy of Orïsha #1)
(Legacy of Orïsha #1)
Autora: Tomi Adeyemi
Saga: Legacy of Orïsha #1
Género: Fantasía, Juvenil
Idioma: Español
Idioma: Español
Editorial: RBA - Riverside Agency
Páginas: 624
Páginas: 624
Fecha de publicación: Mayo de 2018
Zélie Adebola recuerda cuando la tierra de Orïsha desprendía magia. Pero todo cambió la noche en que esta desapareció. Por orden del rey, los maji fueron perseguidos y aniquilados.
Ahora, Zélie tiene una oportunidad de devolver la magia a su gente, pero para ello deberá ser más rápida y astuta que el príncipe heredero del trono, que está dispuesto a todo con tal de erradicar la magia para siempre.
El peligro acecha en Orïsha, donde los leopardarios de nieve campan a sus anchas y los espíritus vengativos esperan escondidos bajo el agua. Sin embargo, el mayor peligro puede ser la propia Zélie en su lucha por controlar sus poderes.
ES EL MOMENTO DE QUE ZÉLIE RECUPERE SU LEGADO.
ES EL MOMENTO DE QUE UN PUEBLO RECUPERE LA ESPERANZA.
Ahora, Zélie tiene una oportunidad de devolver la magia a su gente, pero para ello deberá ser más rápida y astuta que el príncipe heredero del trono, que está dispuesto a todo con tal de erradicar la magia para siempre.
El peligro acecha en Orïsha, donde los leopardarios de nieve campan a sus anchas y los espíritus vengativos esperan escondidos bajo el agua. Sin embargo, el mayor peligro puede ser la propia Zélie en su lucha por controlar sus poderes.
ES EL MOMENTO DE QUE ZÉLIE RECUPERE SU LEGADO.
ES EL MOMENTO DE QUE UN PUEBLO RECUPERE LA ESPERANZA.
El rey ha erradicado la magia de toda Orïsha, castigando a aquellos que habían sido bendecidos con su don. Cuando Zélie cruza caminos con una princesa que lleva un antiguo pergamino, la magia comienza a correr por sus venas apenas lo toca. Pero para devolver la magia a todos, deberá hacer un viaje lleno de peligros, huyendo del ejército del rey, y llegar a una isla misteriosa para realizar un ritual antes de que sea demasiado tarde.
Tenía muchas ganas de leer este libro con todo el hype que tiene. Había tantas personas recomendándolo que estaba absolutamente segura que lo iba a amar. Así que cuando fui a la FILBA, aproveché a comprarlo y traerlo a casa, y finalmente lo leí.
La historia comienza con Zélie luchando para convertirse en una guerrera. Todo a espaldas de los guardias reales, claro, ya que el rey oprime a su pueblo y no aceptará ningún indicio de rebelión.
El rey ha erradicado la magia de toda Orïsha, asesinando a todos aquellos que tenían poderes después de quitárselos, y dejando con vida tan sólo a sus hijos. Pero sumado al dolor de la pérdida, han tenido que lidiar con la discriminación y el maltrato por ser quienes son.
Tras una situación espantosa en el palacio, la princesa Amari huye con un pergamino mágico y cruza caminos con Zélie. Ésta última decide ayudarla contra su mejor juicio, pero nunca se hubiese imaginado que ese mismo pergamino sería el que despertara la magia en ella.
En busca de respuestas y huyendo del ejército del rey que quiere recuperar tanto el pergamino como a la princesa, Zélie junto a su hermano Tzain y Amari emprende un viaje cuyo destino puede devolverles la magia a todos los maji.
Lo primero que voy a decir es que Zélie es un personaje que me gustó de inmediato. Una chica luchadora, con carácter, que busca defender a su pueblo y sus creencias. Y entonces sus constantes metidas de pata comenzaron a sacarme de quicio. Entiendo que puede cometer equivocaciones, pero su carácter explosivo e impulsivo la metió en toneladas de problemas.
Entonces tenemos a su hermano Tzain que es carismático y encantador... y luego ya no lo es. Pensé que sería uno de mis personajes favoritos cuando apareció pero fue perdiendo ese encanto que tenía al inicio. Y algunas de sus actitudes no me gustaron nada.
Y luego está Amari, la princesa que es hija del cruel rey que gobierna Orisha. Ella comienza temerosa y con miedo a pelear, pero sabiendo que es necesario un cambio. Amari poco a poco va tomando valor y peleando, eso me gustó mucho. Se va convirtiendo en toda una leona cuando se trata de defender a sus amigos.
Por otro lado, el hermano de Amari y capitán del ejército, es quien persigue a este grupo que busca devolver la magia al pueblo. Inan comienza siendo un buen villano, o eso fue lo que pensé al leer la sinopsis y comenzar a leer este libro. Ya saben que amo los villanos y por eso inicialmente estaba obsesionada con él. Cuando la magia lo toca de cerca y confirma sus miedos de que es un veneno que plaga al mundo, su determinación aumenta el doble para evitar que la magia se propague. Sin embargo, se obsesiona completamente con Zélie.En serio, es una obsesión enfermiza al nivel Lord Voldemort queriendo matar a Harry Potter. Parecía que no pensaba en otra cosa que matar a Zélie. Y de repente, su opinión cambia en tan sólo un momento, así de rápido. Lo cual no tuvo sentido para mí más allá de lo que lo haya hecho cambiar. Nop, no es como si no hubiese presenciado ya cientos de hechos espantosos a lo largo de su vida. Y luego va y viene sin poder decidirse en cuanto a sus convicciones, dándose vuelta de un lado a otro como un panqueque. Esa es la clase de personas más peligrosas porque son inestables: así como cambió para bien puede volver a cambiar para mal porque no sabe en lo que cree. Y es fácilmente manipulable. Llegado un momento, comencé a gritarle al libro -o más bien a él- porque no podía ser que no abriera los ojos y notara que lo estaban manipulando. Me recordó a Cal de La Reina Roja, otro príncipe que duda constantemente de sus convicciones. Pero Inan lo superó. Y por mucho. Juro que me sacó completamente de quicio y aún terminado el libro sigo exasperada por la actitud que tuvo en prácticamente todo el libro.
Éstos fueron los personajes principales (tenemos tres puntos de vista y eso está genial) y la verdad es que no pude conectar con ninguno de ellos. No sé porqué, no sentí una particularidad en su carácter que los hiciera especiales para mí. O quizás es que todos me sacaron de quicio en algún momento de la historia -o en varios xD
En cuanto a las interacciones entre los personajes, creo que lo que más me gustó fue la amistad entre Zélie y Amari. No han comenzado muy bien, pero ambas han visto algo valioso en la otra con el paso de los días y han formado un vínculo muy fuerte, se han convertido en el apoyo de la otra. Por otro lado, la relación entre Amari y Tzain no ha llegado a mucho, así que espero que la autora lo desarrolle más en el próximo libro. Y las interacciones entre Zélie e Inan al comienzo me parecieron muy entretenidas. Esos dos realmente se odiaban a muerte y se provocaban de una forma que hasta me causaba gracia. También había una conexión entre ambos, potenciada por la magia. Eso me pareció muy interesante, realmente tenía mucha curiosidad acerca del origen de su conexión. Pero nunca llegó la explicación, así que ahora mismo no tiene mucho sentido para mí su relación, incluso fue bastante extraño. Quizás se explique en el siguiente libro, pero en este momento simplemente no le encuentro razón. Toda la parte romántica fue bastante extraña y saben que soy una romántica empedernida pero en este caso sentí que el romance estuvo de más.
Claro que más allá de ésto, algo que me encantó fue la ambientación de la historia y la mitología nigeriana. La historia de los dioses me sumergió completamente en las páginas, me hizo imaginar como si lo estuviese viendo con mis propios ojos y me dejó devorando las páginas de forma completamente adictiva. Fue fascinante y muy interesante, como así también toda la parte fantástica del libro.
El sistema de magia me encantó demasiado, es tan original y creativo. Zélie posee poderes sobre los espíritus de los muertos y eso fue increíble, no creo haber leído sobre algo así nunca antes. Y aparece otro tipo de magia en donde se crea un espacio onírico, y eso me parece completamente fascinante. Me hubiese gustado que la autora lo desarrollara más, es que me encanta todo lo relacionado con los sueños y es tan amplio para crear elementos.
La magia también creó unas batallas realmente épicas e impresionantes. Es un libro que tiene mucha acción y adrenalina, escenas repletas de tensión y drama. Lo cual me lleva a hacer alusión a un dramatismo excesivo. Este libro me pareció demasiado cruel en varias partes, innecesariamente cruel. Después de leer la nota de la autora, entiendo su intención de mostrar la crueldad del mundo pero justamente ésto es ficción y leo para escapar de la realidad que ya todos sabemos que es cruel y despiadada. Sólo basta mirar el noticiero media hora para deprimirte todo el día, y hablo de cosas que suceden en todos lados. Me gustó el sentimiento que volcó en la historia en la búsqueda de la libertad y la justicia, la lucha por detener la opresión y la discriminación, el maltrato. Me parecen temas muy importantes y profundos, pero varias veces llegó a ser demasiado cruel. Así que ya sé que esas cosas suceden, pero no quiero deprimirme más leyendo acerca de crueldades de este tipo. Es por eso que ya no leo muchas distopías.
Como no estaba muy conectada con el libro, no he sufrido tanto. Creo que ese es el lado bueno de no haberme enganchado demasiado con la historia. No estoy segura si fue por los personajes o por el tipo de fantasía épica que no logré engancharme, pero juro que le puse todas las ganas y esperaba ese momento en que me entusiasmara con la lectura. Pero ese momento nunca llegó.
No me malentiendan, el libro me gustó mucho, pero no me encantó. No me enloqueció como esperaba que lo hiciera con todo el hype que tenía. Puede justamente que sea por el asunto del viaje. Sé que es un recurso muy usado en la fantasía épica, pero no hay un solo libro de este género que tenga un viaje que me enganche. Siento que el viaje se vuelve el tema principal y el resto de la trama pasa a un segundo plano. Y los viajes me terminan aburriendo y pareciendo muy densos, bastante irónico siendo que el viaje en sí genera movimiento de un lado a otro.
También estaba pasando por un poco de bloqueo de lectora cuando lo leí y puede ser eso, o el hecho de que he llegado a los 600 libros leídos y ya se necesita algo muy impresionante para encantarme.
Como ya he dicho, el mundo creado por la autora ha sido hermoso y sus descripciones bellísimas te sumergen en la historia y te hacen imaginar todo lo que va narrando. Eso es lo que más me gustó del libro y de hecho es una parte muy importante de la historia. También tiene muy buenos giros y revelaciones, aunque el final ya me lo veía venir desde varios capítulos antes.
¿Algo que me encantó en las últimas páginas del libro? Röen. Sip, me encantó un personaje que apareció casi al final del libro (aunque en realidad aparece como a la mitad pero apenas). Por supuesto que me tenía que gustar el bandido pero es que bueno, es encantador e irresistible. Tengo muchas ganas de conocerlo mejor en el próximo libro, creo que si hubiese tenido más protagonismo en este tomo, la historia me hubiese enganchado más.
Bueno, sé que a muchos o más bien casi todos les encantó este libro y yo lamento que a mí no me hubiese pasado lo mismo. Y no saben cómo quería que me gustara porque tenía todas mis fichas puestas en este libro, pero no sucedió. Y eso me pone triste y me decepciona, pero quizás iba con las expectativas demasiado altas. Una vez más, no estoy diciendo que no me haya gustado, de hecho me gustó bastante, pero no tanto como esperaba.
Un libro con una ambientación impresionante, con una cultura y mitología fascinante que me dejaron enganchada leyendo. Personajes con los que no pude conectar, pero con un sistema de magia que me encantó. Con varias escenas demasiado crueles y dramáticas, otras repletas de tensión y adrenalina, y unas batallas épicas llenas de acción y fantasía, Hijos de Sangre y Hueso me gustó mucho pero no tanto como esperaba. Le voy a dar 3.5 plumitas.
La historia comienza con Zélie luchando para convertirse en una guerrera. Todo a espaldas de los guardias reales, claro, ya que el rey oprime a su pueblo y no aceptará ningún indicio de rebelión.
El rey ha erradicado la magia de toda Orïsha, asesinando a todos aquellos que tenían poderes después de quitárselos, y dejando con vida tan sólo a sus hijos. Pero sumado al dolor de la pérdida, han tenido que lidiar con la discriminación y el maltrato por ser quienes son.
Tras una situación espantosa en el palacio, la princesa Amari huye con un pergamino mágico y cruza caminos con Zélie. Ésta última decide ayudarla contra su mejor juicio, pero nunca se hubiese imaginado que ese mismo pergamino sería el que despertara la magia en ella.
En busca de respuestas y huyendo del ejército del rey que quiere recuperar tanto el pergamino como a la princesa, Zélie junto a su hermano Tzain y Amari emprende un viaje cuyo destino puede devolverles la magia a todos los maji.
"-Mientras nos falte la magia, nunca nos tratarán con respeto."
Lo primero que voy a decir es que Zélie es un personaje que me gustó de inmediato. Una chica luchadora, con carácter, que busca defender a su pueblo y sus creencias. Y entonces sus constantes metidas de pata comenzaron a sacarme de quicio. Entiendo que puede cometer equivocaciones, pero su carácter explosivo e impulsivo la metió en toneladas de problemas.
Entonces tenemos a su hermano Tzain que es carismático y encantador... y luego ya no lo es. Pensé que sería uno de mis personajes favoritos cuando apareció pero fue perdiendo ese encanto que tenía al inicio. Y algunas de sus actitudes no me gustaron nada.
Y luego está Amari, la princesa que es hija del cruel rey que gobierna Orisha. Ella comienza temerosa y con miedo a pelear, pero sabiendo que es necesario un cambio. Amari poco a poco va tomando valor y peleando, eso me gustó mucho. Se va convirtiendo en toda una leona cuando se trata de defender a sus amigos.
Por otro lado, el hermano de Amari y capitán del ejército, es quien persigue a este grupo que busca devolver la magia al pueblo. Inan comienza siendo un buen villano, o eso fue lo que pensé al leer la sinopsis y comenzar a leer este libro. Ya saben que amo los villanos y por eso inicialmente estaba obsesionada con él. Cuando la magia lo toca de cerca y confirma sus miedos de que es un veneno que plaga al mundo, su determinación aumenta el doble para evitar que la magia se propague. Sin embargo, se obsesiona completamente con Zélie.
Éstos fueron los personajes principales (tenemos tres puntos de vista y eso está genial) y la verdad es que no pude conectar con ninguno de ellos. No sé porqué, no sentí una particularidad en su carácter que los hiciera especiales para mí. O quizás es que todos me sacaron de quicio en algún momento de la historia -o en varios xD
"No hay por qué temer a la magia.Nos basta con tenernos el uno al otro."
En cuanto a las interacciones entre los personajes, creo que lo que más me gustó fue la amistad entre Zélie y Amari. No han comenzado muy bien, pero ambas han visto algo valioso en la otra con el paso de los días y han formado un vínculo muy fuerte, se han convertido en el apoyo de la otra. Por otro lado, la relación entre Amari y Tzain no ha llegado a mucho, así que espero que la autora lo desarrolle más en el próximo libro. Y las interacciones entre Zélie e Inan al comienzo me parecieron muy entretenidas. Esos dos realmente se odiaban a muerte y se provocaban de una forma que hasta me causaba gracia. También había una conexión entre ambos, potenciada por la magia. Eso me pareció muy interesante, realmente tenía mucha curiosidad acerca del origen de su conexión. Pero nunca llegó la explicación, así que ahora mismo no tiene mucho sentido para mí su relación, incluso fue bastante extraño. Quizás se explique en el siguiente libro, pero en este momento simplemente no le encuentro razón. Toda la parte romántica fue bastante extraña y saben que soy una romántica empedernida pero en este caso sentí que el romance estuvo de más.
"-Te encanta meterte conmigo, ¿verdad?-Me gusta casi tanto como vencerte con el palo de combate."
Claro que más allá de ésto, algo que me encantó fue la ambientación de la historia y la mitología nigeriana. La historia de los dioses me sumergió completamente en las páginas, me hizo imaginar como si lo estuviese viendo con mis propios ojos y me dejó devorando las páginas de forma completamente adictiva. Fue fascinante y muy interesante, como así también toda la parte fantástica del libro.
El sistema de magia me encantó demasiado, es tan original y creativo. Zélie posee poderes sobre los espíritus de los muertos y eso fue increíble, no creo haber leído sobre algo así nunca antes. Y aparece otro tipo de magia en donde se crea un espacio onírico, y eso me parece completamente fascinante. Me hubiese gustado que la autora lo desarrollara más, es que me encanta todo lo relacionado con los sueños y es tan amplio para crear elementos.
La magia también creó unas batallas realmente épicas e impresionantes. Es un libro que tiene mucha acción y adrenalina, escenas repletas de tensión y drama. Lo cual me lleva a hacer alusión a un dramatismo excesivo. Este libro me pareció demasiado cruel en varias partes, innecesariamente cruel. Después de leer la nota de la autora, entiendo su intención de mostrar la crueldad del mundo pero justamente ésto es ficción y leo para escapar de la realidad que ya todos sabemos que es cruel y despiadada. Sólo basta mirar el noticiero media hora para deprimirte todo el día, y hablo de cosas que suceden en todos lados. Me gustó el sentimiento que volcó en la historia en la búsqueda de la libertad y la justicia, la lucha por detener la opresión y la discriminación, el maltrato. Me parecen temas muy importantes y profundos, pero varias veces llegó a ser demasiado cruel. Así que ya sé que esas cosas suceden, pero no quiero deprimirme más leyendo acerca de crueldades de este tipo. Es por eso que ya no leo muchas distopías.
Como no estaba muy conectada con el libro, no he sufrido tanto. Creo que ese es el lado bueno de no haberme enganchado demasiado con la historia. No estoy segura si fue por los personajes o por el tipo de fantasía épica que no logré engancharme, pero juro que le puse todas las ganas y esperaba ese momento en que me entusiasmara con la lectura. Pero ese momento nunca llegó.
"Quiere creer que si jugamos según las reglas de la monarquía estaremos a salvo, pero nada puede protegernos cuando esas reglas están enraizadas en el odio."
No me malentiendan, el libro me gustó mucho, pero no me encantó. No me enloqueció como esperaba que lo hiciera con todo el hype que tenía. Puede justamente que sea por el asunto del viaje. Sé que es un recurso muy usado en la fantasía épica, pero no hay un solo libro de este género que tenga un viaje que me enganche. Siento que el viaje se vuelve el tema principal y el resto de la trama pasa a un segundo plano. Y los viajes me terminan aburriendo y pareciendo muy densos, bastante irónico siendo que el viaje en sí genera movimiento de un lado a otro.
También estaba pasando por un poco de bloqueo de lectora cuando lo leí y puede ser eso, o el hecho de que he llegado a los 600 libros leídos y ya se necesita algo muy impresionante para encantarme.
Como ya he dicho, el mundo creado por la autora ha sido hermoso y sus descripciones bellísimas te sumergen en la historia y te hacen imaginar todo lo que va narrando. Eso es lo que más me gustó del libro y de hecho es una parte muy importante de la historia. También tiene muy buenos giros y revelaciones, aunque el final ya me lo veía venir desde varios capítulos antes.
¿Algo que me encantó en las últimas páginas del libro? Röen. Sip, me encantó un personaje que apareció casi al final del libro (aunque en realidad aparece como a la mitad pero apenas). Por supuesto que me tenía que gustar el bandido pero es que bueno, es encantador e irresistible. Tengo muchas ganas de conocerlo mejor en el próximo libro, creo que si hubiese tenido más protagonismo en este tomo, la historia me hubiese enganchado más.
Bueno, sé que a muchos o más bien casi todos les encantó este libro y yo lamento que a mí no me hubiese pasado lo mismo. Y no saben cómo quería que me gustara porque tenía todas mis fichas puestas en este libro, pero no sucedió. Y eso me pone triste y me decepciona, pero quizás iba con las expectativas demasiado altas. Una vez más, no estoy diciendo que no me haya gustado, de hecho me gustó bastante, pero no tanto como esperaba.
"Mamá solía decir que, al principio de los tiempos, el pelo blanco era señal de los poderes de los cielos y de la tierra. Contenía la belleza, la virtud y el amor, significaba que contábamos con la bendición de los dioses celestiales. Pero cuando todo cambió, la magia se convirtió en algo abominable. Nuestra herencia se transformó en algo odioso."
Un libro con una ambientación impresionante, con una cultura y mitología fascinante que me dejaron enganchada leyendo. Personajes con los que no pude conectar, pero con un sistema de magia que me encantó. Con varias escenas demasiado crueles y dramáticas, otras repletas de tensión y adrenalina, y unas batallas épicas llenas de acción y fantasía, Hijos de Sangre y Hueso me gustó mucho pero no tanto como esperaba. Le voy a dar 3.5 plumitas.
Sobre la autora:
Tomi Adeyemi es una escritora y asesora de escritura creativa de origen nigeriano-estadounidense afincada en San Diego (California). Tras graduarse con honores en Literatura Inglesa en la Universidad de Harvard, Adeyemi recibió una beca que le permitió estudiar la mitología y la cultura de África occidental en Salvador (Brasil). Cuando no está enfrascada en alguna de sus novelas, se dedica a escribir en su blog y a enseñar escritura creativa a sus seguidores en tomiadeyemi.com. HIJOS DE SANGRE Y HUESO es su primera novela, y los estudios de la Fox ya están trabajando para llevarla al cine.
Hoooola, Agus !!!
ResponderBorrarWow, no se ve tan mal :P Yo leí esta novela apenas salió y no me gustó en absoluto. Le di solo 1 estrella de puntaje y me sentí súper decepcionada jajajajaj. Pero entiendo por qué el hype.
GRACIAS POR TU BELLA RESEÑAAAAAA <3
Besos! Nos leemos :)